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Después de 52 años de guerra, las Farc firmaron un acuerdo de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos y más de 7 mil excombatientes dejaron sus armas. En ese acuerdo se definió que diez curules, cinco de Senado y cinco de Cámara de Representantes, serían ocupadas por miembros del nuevo partido político de la exguerrilla, Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común. De allí resultaron los nombres de los diez congresistas y la candidatura presidencial de Rodrigo Londoño, Timochenko, el otrora máximo jefe de la guerrilla.
Actualmente, sólo nueve miembros están ocupando sus curules en el Capitolio. Jesús Sántrich no ha podido posesionarse ya que sobre él pesa una investigación judicial por presuntamente haber participado en negocios de narcotráfico, después de la firma del acuerdo de paz. Esta nota contiene los perfiles de los nueve congresistas de la FARC.
La editora de Colombia2020, Natalia Herrera, entrevistó a Alika Kinan, una de las activistas más reconocidas del mundo contra la trata y la explotación sexual de mujeres y niñas. Kinan visitó Colombia en octubre de 2018, a propósito del debate que se estaba dando en la Corte Constitucional sobre la regulación del uso del suelo de los prostíbulos.
Ella fue la primera mujer en el mundo en ganar un fallo contra el Estado argentino y los proxenetas que la explotaron sexualmente durante 16 años. Para Kinan, "la prostitución es una de las peores formas de violencia de género que sufren principalmente mujeres y niñas" y sin este flagelo, "no existiría explotación sexual ni la trata de personas. Las conexiones que hay entre una y otra son muy fuertes".
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Entre abril y mayo de 2018, los periodistas extranjeros Tom Laffay y Emily Wright, junto con el productor Daniel Bustos, lanzaron el documental "Nos están matando", producto de más de un año de trabajo y de acompañar en su cotidianidad a líder indígena, Feliciano Valencia, y la del líder afrodescendiente, Héctor Marino Carabalí.
La pieza audiovisual pone en relieve la resistencia de los líderes sociales del norte del Cauca, cómo trabajan en la defensa de los derechos humanos y el peligro al que están expuestos constantemente por esta labor.
4. “Hubo 12 mil infiltrados en la desmovilización paramilitar": Iván R. Duque, exjefe de las Auc
El 25 de abril, en el congreso "Para no volver a la guerra, organizado por la Fundación Avanza Colombia en Medellín, el exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia y cabeza política de este grupo armado, Iván Roberto Duque, conocido con el alias de Ernesto Báez, aseguró que durante el gobierno de Álvaro Uribe, cuando se dio la desmovilización de los paramilitares, hubo "12 mil infiltrados que con la apariencia de paramilitares se presentaron en esa desmovilización y gozaron de los beneficios ofrecidos por el gobierno".
También narró cómo fue testigo, en esa época, de la llegada de camiones provenientes de Puerto Berrío "repletos de vagos, prostitutas y desempleados que se sumaron a la desmovilización”.
Antes de desaparecer del mapa junto con otros mandos medios de las Farc, el exjefe guerrillero, Henry Castellanos o "Romaña" dirigía los proyectos productivos en una finca ubidada en la vereda El Diamante, en el municipio de La Uribe (Meta).
En esta entrevista cuenta que salió del espacio de reincorporación de Tumaco (Nariño) porque estaba decepcionado de la falta de apoyo del Estado colombiano a la reincorporación de las Farc y que han podido salir adelante con el dinero de la cooperación internacional, que ha sido invertido en cultivos y proyectos productivos.
En esa finca, al momento de ser entrevistado, tenía 120 hectáreas de tierras, de las cuales solo 20 estaban sembradas con maíz, plátano y fríjol. Tenían cuatro piscinas con cachama, una marranera, un corral con gallinas, pavos y patos y 350 cabezas de ganado.
Estaba "jugándosela" por el proceso de paz, sin embargo, el proceso judicial en el que está Santrich, causó desconfianza con el Estado. Hoy, no se sabe cuál es su paradero, pero ha rendido los informes que la Justicia Especial para la Paz le ha requerido.
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Desde La Picota, donde se encuentra recluido, Santrich le respondió a El Espectador un cuestionario sobre su captura y la solicitud de extradición por Estados Unidos, por narcotráfico. En la nota, insiste en su inocencia, dice que hubo traición por parte del gobierno a lo pactado en La Habana y que no se someterá a la justicia ordinaria colombiana ni estadounidense.
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En el último trimestre del año, las noticias alrededor de quién sería el nuevo director del Centro Nacional de Memoria Histórica, tras la salida de Gonzalo Sánchez, dieron mucho de qué hablar y detuvieron la aspiración del cargo de Mario Javier Pacheco García, periodista de Ocaña (Norte de Santander).
Su postulación a este cargo se convirtió en escándalo tras la publicación de este artículo, en el que se revela su posición frente a esta institución, encargada de reconstruir la memoria del conflicto armado colombiano. El 3 de octubre, Pacheco publicó una columna de opinión en la que sostiene que el Centro Nacional de Memoria Histórica "está infiltrado por la guerrilla".
También deja al descubierto que el título de historiador que él refiere tener para este cargo en realidad no existe. Lo mismo ocurrió con su doctorado en Ciencias Políticas, el cual dijo que estaba cursando en la Atlantic International University, una universidad a distancia con sede en Hawaii y que en Colombia fue desacreditada.
Este el perfil de uno de los hombres más buscados por el gobierno de Colombia y Ecuador hasta el 21 de diciembre de 2018, día en el que el presidente Iván Duque anunció la muerte de Wálter Patricio Arizala Vernaza, alias Guacho, en una operación del Ejército.
En abril de 2018, este disidente de las Farc y jefe del Frente Óliver Sinisterra, que opera en Nariño, asesinó junto con sus hombres a tres integrantes de un equipo periodístico del diario ecuatoriano El Comercio, después de tenerlos varios días en cautiverio.
Otra nota relacionada con la captura de Jesús Sántrich estuvo entre las más leídas en el 2018. Colombia2020 hizo un análisis sobre las consecuencias de este hecho para el proceso de paz con las Farc. Una de las consecuencias fue el posible aumento de "la desconfianza en el acuerdo de paz por parte de los mandos medios de la antigua guerrilla". Efectivamente, Iván Márquez, Fabián Ramírez, Iván Merchán, Aldinever Morantes, Enrique Marulanda, Hernán Darío Velásquez, Albeiro Córdoba, Iván Alí, Henry Castellanos, nueve mandos medios de la extinta guerrilla, dejaron sus espacios territoriales finales de agosto y aún sigue sin conocerse su paradero.
Entre otras de las consecuencias mencionadas está la puesta a prueba de la Jurisdicción Especial para la Paz, el fortalecimiento de las disidencias y el argumento de la derecha política del país de que los excombatientes siguen delinquiendo.
A comienzos de octubre, el país se conmocionó con la noticia del secuestro del hijo de Edwin Contreras, alcalde de El Carmen (Norte de Santander). La información del secuestro de Cristo José, el 3 de octubre, la dio a conocer el mismo presidente Iván Dique. De inmediato, se desplegaron equipos del Ejército y se creó una comisión humanitaria para su liberación, la cual se dio el 9 de octubre.